¿Qué fue de ese poema que no pude atrapar, el que pasó rengueando frente a mí con las alitas rotas?

viernes, julio 16, 2010

Es mi culpa esa sonrisa forzada, y el malestar en el recuerdo.
Las palabras enredadas, que pronuncias mientras duermo.
Percibo tu soledad no asumida y tu mirada algo infantil.
Oigo tu plegaria inquisitiva, y miento mi escape más sutil.
Temo que son duras las palabras que aún no me atrevo a escuchar.
Yo fuí quien clavó la daga en tu alma;y mi herida la que debería sangrar.
Tiene todo hoy aroma a culpa. Tiene mi alma hoy una armadura.
Tu reclamo en mi vacío se oculta. Brota en mí tu dolor y tu amargura.
Te entrego mi actuación más sublime. Un ramo de rosas con espinas,
mi culpa, que nada la redime...
Te regalo mi adiós desde una esquina.




De ella para mí...


1 comentario:

Blackbird dijo...

Nuevamente sorprendiéndome... nuevamente emocionándome...
Quizás ésta vez más, con éstas palabras tan cercanas, tan para mí...
Como te dije alguna vez...
"Me vivís, me matás, me resucitás"

Y acordate que somos dos en ésta historia, no cargues con todo, me corresponde también a mí... También llevo algunas culpas encima... sí?

Fede... Te adoro con el alma y eso no cambia aunque la vida nos separe alguna vez y para siempre... No lo olvides.


Sos magia en mi vida...!