Acá estoy, un poco despabilada, un poco esperando... Escuchando un poco de trova, un poco de algo. Pienso que hace mucho no escribo, ni en una hoja, ni en el blog... Sí, publiqué alguna que otra cosa en éste último tiempo, pero ya no escribo como antes. Quizás sea cierto que la tristeza inspira a uno, o quizás en mi caso, simplemente se trate de un bloqueo temporal, quizás.
Tengo ganas de escribir, pero no puedo obligarme, no puedo seguir guardando borradores con frases inconclusas, con textos vacíos o ideas a medio terminar.
Me gusta entrar al blog, y pasear por él, revisarlo, releerlo, me gusta lo que ven mis ojos, me gusta saber que hubo una época en la que las palabras fluían a través de mis dedos, que de una pequeña vivencia podía inventarme una historia más grande, inventarle un final, adornarla. Sí, tal vez era un poco más triste éste "diario personal" pero estaba más vivo, no hay duda.
Supongo que es cuestión de tiempo, mientras tanto sigo haciéndole boca a boca para que sobreviva, para que siga adelante, y no viva de viejos recuerdos, de viejas historias, que aunque las ame, ya forman parte de su pasado (del mío).
Así que si sos un nuevo lector, si por casualidad caíste acá, te pido que empieces de atrás para adelante, para que puedas disfrutar de mis textos, y otras cositas, y así puedas entender de lo que hablo.
3.30am
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