¿Qué fue de ese poema que no pude atrapar, el que pasó rengueando frente a mí con las alitas rotas?

miércoles, abril 27, 2011

Me vivís, me matás, me resucitás.

Me vivís, me matás, me resucitás.

Me vivís, me matás, me resucitás.

Me vivís, me matás, me resucitás.

Me vivís, me matás, me resucitás.

Me vivís, me matás, me resucitás.

Me vivís, me matás, me resucitás.

Me vivís, me matás, me resucitás.

Me vivís, me matás, me resucitás.

Me vivís, me matás, me resucitás. 

1 comentario:

Lucas dijo...

Salvo de que te revive, después te mata y encima te vive!!! jaja es verdad que siempre están esos/as que les das la mano y te agarran hasta la sombra jajaja



eee yoo jaja.